Carta a una desconocida (Conversación con una misma)

Sueño...es lo que tengo desde que hablamos y muy poco a poco nos conocemos.
Temerosa yo de sufrir, desconfiada tú de mis palabras, has sufrido mucho y yo aun no he dejado de hacerlo, pero mis motivos de sufrimiento han cambiado, es una locura, lo sé, no está bien, no es justo y parece irreal...pero algo es cierto, no sonrío de felicidad, ni porque soy así. Todo empezó con una media sonrisa y una carcajada le siguió, en la que me decía a mí misma, "Es una locura, una tontería, no es cierto, solo ha llamado tu atención, es una chica interesante, pero de ahí no más, sino...mmm...piensa, está dolida, tú llevas más de dos años así, has rechazado conocer a miles de personas maravillosas, obcecada en algo que en tanto tiempo solo te hizo sufrir..entiéndela, es más ¿Crees que te va a hacer caso, que se va a interesar por ti? Sé realista amiga... Ella no puede ser para ti, y menos sin estar ambas curadas del pasado."
Todo ello en una sola risotada con media sonrisa en los labios, sintiéndome la mujer más mema del mundo, pero sin darme cuenta "memamente bien".

Finalmente me calmo, te hablo, investigo y analizo lo que me cuentas, vamos que me complico sola. Y así pasando los días, aun sin conocerte y cuando me voy a dar cuenta ¿Estás en mi mente?... ¡Socorro, soy idiota!.. De esta me he sacado el doctorado con una tesis de fin de carrera.
Simplemente eres realista, me gusta(s), voy a seguir conociéndote sin darle importancia a que te pases en mi mente más horas de lo habitual, serás la novedad...solo eso, supongo, quizá, es posible, no lo se...
"Amiga respira hondo, esto no es posible, echa el freno, sois dos desconocidas que viven en la misma ciudad, sólo eso, ya dijo que no le interesas, deja de pensar y tenla como amiga...y bueno esa media sonrisa...enfin, compórtate como una adulta..."
Y mi niña interior sonrió, es verdad que soy muy pilla...resulta que ¿Todo el día en la cabeza y la sonrisa completa al imaginar tu sonrisa?¿"Estamos locos o que"?(Me encanta este dicho, me hace gracia)...En respuesta creo que sí, lo estamos, bueno lo estoy.
La cuestión no es ser o no ser, solo dejarse llevar o dejarse enamorar...
Científica explosiva, otra expresión que me hace reír, tanto que produce en mí, una reacción química... esto es peor que el botox, o que una película de terror, la sonrisa ya no se me borra y tu nombre tampoco, ni siquiera entiendo porqué te escribo, en el fondo dudo que te dé esta carta, sería absurda ¿No crees, no nos hemos visto más que en la foto de perfil, apenas hablamos más que para decirte un par de chorradas y desearte buena semana?¿Por qué te hago reír, por qué me haces ser más payasa de lo normal, buscando esa sonrisa que desconozco y dando voz a esa bella risa muda para mis oídos?, me río nerviosa al sentir que lo consigo.
¿Que estoy haciendo, a qué juego si ya me has dicho que no? "lela... ya te ha dicho cosas clave para que entiendas que no le gustas, y es normal...a esa edad decir, 'te haría daño' es más sencillo que decir, 'no me atraes', en el fondo, en el momento en sí, 'en el sexo y a plena luz lo que cuenta es el cuerpo', es lo tangible de tu ser, ¿A donde vas? vete a correr, y déjate de soñar despierta que aun no eres una artista bohemia, no tienes oportunidades con ella por muy romántica que seas, hoy en día eso no funciona, en ningún caso, todo el mundo es más pragmático, solo sirve para empalagar y aborrecer, así no la conquistarás, no le interesa una lapa que escribe poemas, suena tan tonto todo esto..."
Y cuando me doy cuenta a pasado el día entero y es de noche nuevamente, no he pensado en nada más que atacarme y caerme de las nubes.

Cierro los ojos y me pongo a dormir...¿Soñar, imaginar, suspirar? "Oye tú ¿Me tomas el pelo? Anda léete un libro que hace mucho tiempo que no te lees uno en condiciones y deja de escribirlos en tu blog de locura, llamado imaginación... -Mmmm, no tengo ninguno que me convenza".
Me pongo al piano, acomodo los cascos, apago la luz, inspiro profundo, cierro los ojos y... dejo a mis dedos jugar a tientas por encima de las teclas...al azar... Una lágrima se me escapa, el corazón se me relentiza y cada latido es un golpe que me remueve hasta lo más recóndito de las entrañas. Mis dedos en su juego de azar tocan siempre una melodía improvisada que falla más veces de las que acierta, pero me revuelve, es una melodía triste, melancólica y desafinada... Tu sonrisa viene de sorpresa a mis párpados, me sobresaltas, me siento bipolar... "¿Sonrío y lloro, qué es esto?" Una lucha comienza dentro de mí y otra vez ganas tu, mis manos te han ayudado, por primera vez mi improvisación deja su pesadumbre usual y alegra mi alma a pesar de las lágrimas. Me sulfuro, lo apago y lo tapo. "Hoy te quedas sin tus caricias nocturnas de buenas noches, tú también te estás burlando de mí, el fiel aliado que nunca me falla y te ríes hoy de mi, querido piano... estoy cansada, me voy a dormir". Entre vueltas y sonrisas pierdo la noción del tiempo y me duermo.
Abro los ojos para aporrear el despertador, atino, me vuelvo a dormir..."Qué extraño" estoy dormida pero estoy 'despierta' sonriendo y escribiendo tu poesía en sueños, sintiendo mi corazón encoger del miedo...
Al día siguiente, para calmar la musa que has despertado, escribo las primeras frases y las publico a ver si así se tranquiliza por un tiempo y me deja descansar, caso error, lejos de la intención que tenia, se me desboca la inspiración... peor que un camello con sed cuando ve agua a escasos metros de él.

'Sueño con que mis pies sean tus huellas y que mis amaneceres sean en el cielo azul de tus lozanos ojos, que aturden mis sentidos y me hacen desconocer los atardeceres, ¡Sí, desconocida, ahora eres la que desata mi fantasía presente, me obliga a desear tenerte en mi futuro, incierto y ausente!'. Mi mano no se cansa, pues te escribo en 'mi ratito de más', durmiendo contenta. Me recorren sensaciones por todo el organismo...imagínate...el ansia de abrazarte y protegerte me invade y quema por dentro...

Entiendo por qué me duele hoy la rodilla y es que abracé tu vacío contra la pared, retumbó entera pero lejos de despertarme, en mis sueños sonó como una ola romper fuerte y cercana, te veo tumbada a mi lado observando el sol y la noche clara, mientras el sol se apaga y la luna aun no brilla acompañante de mis nostalgias.

Hoy ya no seducen mi atención, son tus ojos los que me dejan sin aire, muerdo mi labio para volver a la tierra, sonrío disimuladamente y vuelvo a ahogarme en tu mirada, y es entonces cuando pierdo la relación del tiempo y se me paraliza la razón, imagino que te hago reír y te beso. "¡boba, menos mal que esta carta nunca se la vas a entregar porque es para castigarte y dejarte encerrada en la habitación!".

La quimera de quererte y protegerte me invade con una canción de fondo que me hace bailar y cantar...al son de mi sentir. Mi 'ratito de más' por hoy se terminó.

Despierto de esa utopía, agarro el teléfono, abro tu conversación y durante largo lapso de tiempo dudo de si saludarte, y de como hacerlo. Solo ha sido una maravilla de sueño pero yo como si nada, te doy los buenos días a mi manera y, como si aquí (En mi loca locura) no hubiera pasado nada. Camuflándome tras mi trastorno mental simulado, para ti dentro de la 'normalidad' de hablar conmigo, sajando mis ganas de contarte lo soberbio que ha sido mi sueño. Quedando casi muda y sin pretextos para, finalmente, despedirme cortésmente, a saber por cuantos días, queriendo realmente pasar el día hablando contigo.

Larga semana, busco justificaciones para lograr tenerte un momento a mi lado y conocerte en persona, confirmar la belleza de la sonrisa que te imagino, escuchar tu risa, entender tus palabras, tus experiencias y gestos, descubriendo la base de tu verdad, tu lenguaje más allá de lo verbal. Poder percibir lo que tus ojos cuentan de ti, lejos de lo que tus exquisitos labios me quieren ocultar.

Busco en tus mensajes el detalle que me permita proponerte tener ese instante, incluso me trago mi propia vergüenza, facilitándote las cosas y propicio el lugar donde podrás encontrarme, pasan días entre conversación y conversación, comprendo tu desconfianza, me toca ser paciente. Concluyendo te aviso de que estoy localizable y donde, solo leerte me provoca, "hazme cosquillas donde quieras, ya me las haces en el alma" pienso yo riendo y siguiendo tu juego.

Un último mensaje enviado. Me vuelvo a casa, agotada, silencio el teléfono y me dejo morir en la cama, sé que no contestarás, estoy segura de ello, tristemente me duermo a las 5 de la madrugada. Llegado el medio día dominguero, aun estoy dormida, el teléfono vibra, perezósamente me voy a dar la vuelta cuando un arrebato me hace cogerlo, pensando que sería alguien para saludar, veo únicamente tu nombre y me caigo de la litera, instantáneamente se me quita el sueño y la modorra, leo que 'pasaste, miraste y no me viste en el local'. Siento culpa de sentarme en una zona tan escondida, súbitamente me inunda un sentimiento de fracaso y me digo "perdiste la oportunidad que esperabas"...me meto en la cama tras contestarte vagamente, me tapo y el teléfono vuelve a vibrar, extrañada lo miro ¿Tú de nuevo? no me lo creo... Me levanto de un salto de la cama, me como las barras de la litera, veo las estrellas pero ni siento ni padezco, ¡Tú, buscando mi conversación!. El mejor despertar hasta la fecha, animada te doy palique, te pincho y me dices que me vienes a pegar, ¡Ahá, esta es la oportunidad!, te digo que si para verte tengo que llevar una paliza tuya, yo encantada, sintiéndolo verdadero. A la tarde se me antoja pasear... (un último intento, te invito a venir y me quedo en la zona por ti.) Me preparo para salir y tu me hablas y me insistes en que salga. Me pongo un taciturno tango francés, y vuelves a insistirme en que salga ya.... Salgo a paso ligero al ritmo del profundo tango, inmersa en mis pensamientos y pesares, rumbo al rompeolas esperando no encontrarme con nadie, y mucho menos contigo, esquivando a los viandantes, ansiando llegar para ver los últimos rayos de luz de un día que empezó dolorosamente fantástico.
¡Y cuál es el susto que llevo al verte, en patines pasar a mi lado , mirándome y sonriéndo-ME! ("Oh bienaventurado día, hoy me regalas abundancia en felicidad") Me estremezco en ese mismo instante, me paralizo, palpito y tiemblo, me tapo la cara sorprendida, pues en ese momento percibí que mis ojos centelleaban, realmente eres preciosa, tus fotografías no hacen juicio al verdadero arte y esencia de tu ser, tu sonrisa, motivo que me paraliza, es tan majestuosa y enternecedora, (debo reñir a mi imaginación, infravaloraba tu verdad)... Tu mirada, ¿Qué decir de ella? simplemente me hipnotiza, me deja estupefacta.
Corres a quitarte los patines, me doy prisa al paso en seguirte...pareces tímida, me cautiva(s). Te ves tan dulce y sensible, tan natural en chándal, eres perfecta pienso para mis adentros, y dejo de pensar, sólo disfruto y espero porque el tiempo pase lento. Descubro tu tranquilidad en tu equivocada timidez, te quiero cerca, nos sentamos y decido regalarte el atardecer, a pesar del frío y de que ya no había sol, no dejo de mirarte de reojo, comenzamos a hablar...(no lo ves pero tu voz me seduce) a penas te dejo hablar, quiero tu atención y mirada aunque no te mire, te observo de reojo y me pierdo en tus ojos, me ríe el alma, esto hace tan solo una semana que lo soñé y se hace realidad. Te doy un largo resumen muy resumido de quien soy. Grabo en mis oídos tus pocas palabras, te interrumpo y sigo hablando, lo siento es que tu voz me está enamorando. Desconecto del lugar y me sorprendes abriendo extensamente tus brazos, me miras y con tu agradable voz me dices ¿Un abracito?...si supieras, te ves tan mona, cómo negarme, te pongo carita de cachorro malherido y me dejo abrazar, tengo miedo de agarrarte y no soltarte, por ello apenas te abrazo con fuerza, muy débil, sí, en ese momento que para ti fue sin significado alguno, a mi me robaste el corazón, desde entonces me paso el día negándolo, tanto me repetiste que no estarías con nadie, y me contaste del amor que te tienen, no quiero que me veas como a ella, como otra más de las que enamoras... ¿O debo luchar y de la poca psicología que sé, he de decir que te lo repetías en alto para autoconvencerte? (No me hagas caso, el enamoramiento busca excusas donde hay vacío)
Te pregunto que quieres, me dices que una persona que te llene, aunque ni me muevo, pienso para mi (yo soy grande, seguro que hasta te desbordo, con y sin mi) ojala te  pudiera llenar...
Te veo reír, cuando ya casi me había sosegado. Se confirma, mi anhelo de hacerte reír día a día aumenta. Por tristeza el momento se nos acabó. Quise dejarte mi chaqueta pues hacia rato que te querías ir por el frío, aunque sentía que era por mi... pase el resto del tiempo en pena. Cuando te pusiste de espaldas a mi, como en mis sueños, desee que te recostaras sobre mis piernas y por eso te coloque delicádamente la capucha de tu sudadera, para controlar el impulso de abrazarte.
Nos vamos camino a la parada de autobús, intento acercarme, te alejas, lo vuelvo a intentar sacando cualquier motivo, desisto y para que no vieras mi desilusión me adelanto unos pasos y camino de nuevo rápido. (mi sueño efímero de realidad ha terminado). Me has demostrado ser muy observadora por ello me adelanto.

Llegó el autobús, te despides de mi, corres a la entrada, y sin quererlo, me encuentro corriendo tras de ti, no quiero que te vayas, casi te agarro y te saco del autobús, en su lugar, sentí que no podía hacer más que pagar tu billete de vuelta a casa, tras el regalo de tu compañía y que vinieras en patines, era lo menos que podía hacer. Te hubiera acompañado a casa y besado tu mano, por hacer el tonto y decirte poniendo voz de galán "cual reina que eres" , únicamente por hacerte reír. Galantería salía de mi al tenerte cerca, fue inevitable prestarte atención, estar pendiente de ti, protegerte y cuidarte, es lo que necesitaba en ese momento. Suspiro muy fuerte al ver el autobús arrancar, sonrío, el día no podía irme mejor.

De vuelta a casa por la calle más conocida de la ciudad. Tres artistas callejeros ganándose la admiración y dinero de los transeúntes, a unos metros de ellos me encuentro un billete bien cuadrado y dobladito, parecía un trozo de papel sin más, era un billete de 5 €, lo cojo. Era para mí, significaba un mensaje de prosperidad. Pero no pude pensar, volví corriendo y se los eché en la cesta a los artistas, procurando que no me vieran. Me arrepentí de hacerlo pues no me sobraban sinceramente.

Me quedé clavada en un callejón reconcomiendome, suspiré de nuevo y sonreí de oreja a oreja hasta el dolor "menuda locura has cometido muchacha, pero sonríe...". En éste día realmente no los necesitaba, lo tenía todo, aunque no tuviera nada salvo techo y cama, "He sido una afortunada, pasé el atardecer contigo, ni el ser humano más rico del mundo lo fue en dicho momento, lo era yo, por ti, porque sí, me enamore de ti finalmente, y ese es el mayor tesoro que necesito".

Al día siguiente, tras una noche muy larga de insomnio y sonrisas con agujetas, al despertar, tras ver el sol relucir por el quicio de la ventana, me acorde de ti, todo brilla más desde ayer por la tarde-noche. Solo pienso en enamorarte, en como conseguirlo y grito como un comercial entusiasmado ¡La voy a enamorar! así agonice de paciencia, pero es mi propósito, aunque esta carta, como dije antes, espero que jamás llegue a tus manos, quien pudiera... Ojalá pudiera volver a abrazarte, con lo dulce que eres...DIME CÓMO ENAMORARTE.

No pude resistirlo, el corazón acelerado de adrenalina, lo necesitaba, hoy te hablé, procuré no ser muy cargante, sin embargo te hablo y hablo para estar más tiempo esperando tus palabras, me encanta(s), me iba a dormir pero los sueños los tengo despierta mientras camino, y de noche no tengo más sueños que desear hacerlos realidad y enamorarte.

No se que tienes ni que has hecho en mi pero no hay palabras que lo describan... Y eres tan real, más que el aire que no necesito tras conocerte, voy por la calle y me siento como la afortunada que lleva el boleto ganador en el bolsillo pero que aún no lo ha cobrado, es decir, no te tengo y puedo perderte, pero espero llegar pronto al destino e ir por el camino correcto para conseguirlo.

Te propongo volver a vernos, volveré a hablar mucho, a ver si esta vez...me callas con un beso... Has ganado este juego, te pienso hasta cuando no debo...

Han pasado días, incluso semanas, tan solo hemos hablado un par de veces más, no muchas, creo que me voy a rendir... No lo sé , hace tiempo que perdí el juego... a sido bonita la ilusión que has creado en mi... gracias, he comprendido que estoy lista para volver a amar y ser amada... Ésta carta pensaba entregártela en mano la próxima vez que nos viéramos, de hecho lo tenía preparado, esta carta constaba de 136 sobre... o en su defecto 4 sobres con 136 hojas, escritas a mano... E ir entregándotelas en cada ocasión que tuviera para compartir un trocito de día contigo...pero no ha sido así...A día de hoy dudo que sea tan afortunada de volver a verte, y con mucha suerte, seguir hablándote, detesto forzar la conversación, es evidente la carencia de interés por tu parte...pero aun así, gracias, he redescubierto mi romanticismo y amor dentro de mi, me has desanclado del pasado. Ha sido tan importante, como te decía, conocerte para mi es una lección de paciencia, aprender a ser paciente...y aquí me tienes a mi y a mi impaciencia, la otra lección que debía aprender de ti a sido la de poder volver a enamorarme de una manera bonita y romántica, aunque ya me quedó claro que eso no va contigo, pero incluso así, gracias pues para mi, es importante. Otras lecciones que saco de ti...me las reservo que no son pocas, el caso es que las adhiero a las motivaciones de cada día y te tomo como ejemplo, como creo recordar, alguna vez te dije que así sería.

Mi impaciencia acaba esta bonita y pasajera ilusión que a abierto mis ojos y mi corazón al mundo, ojala y decidieras enamorarme, pero, no caeré en esa breva, no voy a ser tan ingenua, aunque ganas de serlo no me faltan.

Sin más querida desconocida, contradiciendo lo escrito e intentando autoconvencerme de que así sería, te envío esta carta como agradecimiento por todo el trabajo que has generado en mi y que me ha dado tan grato resultado, sigo sintiéndome afortunada y dicho día el más extraordinario hasta la fecha.

Cuidate, sé feliz, cúrate pronto, y recuerda las piedras, aun frías, se rompen y se quiebran, y en algunas ocasiones, por frías más rápido rompen. No te aferres a la volatilidad del destino, eso tú me has enseñado.